La palabra NAMASTÉ siginifica "el espíritu que está en mí honra al espíritu que está en tí" . Cuando establezcamos contacto visual con otra persona, digamos para nosotros: "NAMASTÉ". Esta es una forma de reconocer que el ser que está ahí, es el mismo que está aquí.
Cuando lo hacemos, la otra persona reconoce en un nivel profundo todo lo que tiene que ver con nosotros: nuestro lenguaje corporal, nuestra expresión, nuestras palabras, el timbre de voz. Aunque este saludo se hace en silencio, la otra persona percibirá consciente o inconscientemente el respeto implícito en él. Practiquemos este ejercicio unos días y verifiquemos si podemos notar alguna diferencia en nuestras interacciones con los demás.
Extraido del libro SINCRODESTINO de DEEPAK CHOPRA.
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